Valiéndose de la agricultura de precisión, los navegadores satelitales y un sofisticado software de gestión agrícola, un ingeniero agrónomo radicado en Las Parejas sembró un lote de soja con una leyenda que se verá desde el espacio hasta que levante la cosecha en abril o mayo próximos.

Martín Olivanti, productor y asesor de empresas agropecuarias, se valió de la plataforma FieldView y una sembradora de densidad variable para programar el trabajo de manera tal que, a medida que el cultivo desarrolle su ciclo, desde el cielo se lea "Colón Capo". 

Auto definido en su cuenta de Twitter "loco x Colón de Santa Fe", lo que hizo el agrónomo fue diseñar la prescripción de siembra para que la máquina, dotada de un programa informático y el correspondiente navegador satelital, suelte más o menos semillas por metro cuadrado según el punto georeferenciado del potrero.
 
Lo que Olivanti compartió en redes es el coloreo que el software le marca de manera esquemática para saber dónde hay más o menos semillas sembradas. Pero con el correr de las semanas, la soja irá creciendo y allí donde se ubican las letras del cartel el satélite irá mostrando una tonalidad más clara que en el resto de la superficie, ya que contará con una menor densidad de plantas.

Lo que parece sólo una idea pintoresca, en realidad refleja un nivel superior de fanatismo ya que incluso podría significar la resignación de rendimiento. Ocurre que el software permite diseñar la siembra de un lote "por ambientes" para que los recursos se optimicen (por ejemplo poner más plantas en la parte más fértil o menos donde es suelo es más pobre) y sacar la mayor cantidad de quintales posible.

Pero el productor en lugar de diseñar la prescripción con este criterio lo hizo según los colores que lleva en el corazón. Como el diseño se "dibuja" con el dedo sobre una pantalla, Olivanti decidió escribir "Colón Capo" y la sembradora cumplió la orden, soltando más o menos semilla según el geo posicionamiento.

"La sembradora reconoce el lugar por la receta cargada en el monitor y tira más o menos semillas cuando pasa por un punto asignado por gps", explicó un asesor a Campolitoral, quien incrementó su sorpresa al señalar que "hasta le puso el acento a la O de Colón". 

Por Juan Manuel Fernández | [email protected] / Campo Litoral